Hace ya mucho tiempo que quiero escribir sobre esto. Esta es una
reflexión personal que procurará unificar la música con la espiritualidad y la
psicología, tal como la vive un servidor y millones de personas en el mundo.
Aviso que este escrito no tiene nada de científico, es una valoración subjetiva
con la que he coincidido con varias personas.
¿No te has parado a pensar alguna vez por qué, ondas que se
mueven en el espacio, tienen tanta influencia en las emociones? Tan solo 5
segundos de una bella melodía podrían hacerte llorar o darte mucha energía.
Partamos desde el principio.
La creación.
Cuando oyes una canción, estás escuchando el “producto final”.
Pero debes pensar que el periodo en que el artista emite la primera nota, hasta
que llega a tus oídos (en la radio fórmula, etc..) pueden haber pasado entre
una media de 200 horas entre composición, ensayo y producción (piénsalo bien 8
días aproximadamente) quien más, quien menos. No siempre requiere tanto tiempo
hay temas que se quedan sólo en composición y la producción forma parte de ella
como ocurre en la música electrónica.
Cualquiera que sea el estilo, el músico parte de la nada, del
vacío y empieza a componer a partir de una nota, desde el corazón o desde la
cabeza o mejor aún ambos juntos. Comenzará a hilar como una tela de araña
melodía tras melodía buscando la combinación perfecta entre notas para un
instrumento. Esto es solo el comienzo a partir de aquí surge la magia. Tanto si
es de corazón como de cabeza el tema “perfecto” vendrá por la combinación más
precisa entre lo que ha hilado un instrumento y las melodías que le corresponda
hacer al otro, y es así como surge una combinación matemática que será un éxito
“sí y solo sí” llega al alma del que escucha y esa construcción de sonidos ha
sido la adecuada para, sea cual sea el estilo…, tocar la fibra de quien lo
escucha, por lo tanto el alma.
Aquí tienes tema perfecto donde puedes estudiar cómo cada músico va hilando nota tras nota...
El emisor,
el canal, el receptor. Un poco de psicología para entendernos.
¿No te has planteado por qué hay músicas que te gustan y otras
que no? ¿Más profundo aún.. porqué un estilo o canción que no me gustaba ahora
me encanta?
Hemos hablado de, como en cualquier comunicación, existe un
emisor (el artista). Esto desde luego es aplicable a cualquiera de las artes y
múltiples combinaciones de estas. El artista crea su obra, pero en un código
concreto, un código estético que llamaremos en este caso “estilo musical”. No
es aleatorio que el artista haya creado esa obra con ese código concreto, lo
curioso del asunto es que debido a su personalidad, generará una composición
que llamará bastante la atención de aquellos que tengan algún rasgo parecido al
artista. Por lo tanto va a haber una sincronía natural entre emisor y receptor.
El “código” emocio/racional de la canción, solo lo sabrá descifrar
aquella persona que por un motivo u otro tenga esa sincronía con el autor. Hay
mucha parte espiritual en este proceso, pues ese código sea cual sea le llegará
al alma. Es aquí cuando me adentro a la función espiritual de la música.
Muestro diferentes ejemplos de códigos “estilos”, ¿Cuál logras
descifrar? ¿Cuál te llega más?
Música y espiritualidad.
Me adentro a la función espiritual de la música y
es la aventura más arriesgada y excitante de todo este texto. Los que amamos la
música e incluso tocamos algún instrumento, si estamos atentos nos damos cuenta
que hay algo más. Es curioso cuando componiendo una melodía se te ponen los
pelos como escarpias, curioso también que ocurra luego en el ensayo con los
compañeros, y conmueva del mismo modo al oyente.
¿Qué es la espiritualidad? Extensa pregunta. La espiritualidad
no tiene que ver con la religión. La religión es un modo de canalizar y
disfrutar la espiritualidad. Desde mi punto de vista es una dimensión cercana a
la dimensión del amor, muy cercana, pero no son lo mismo. La espiritualidad es
intangible, misteriosa, y está estrechamente vinculada al alma. ¿Acaso
cualquier canción que te guste no te toca el alma?. Una te da por llorar, otra
por reír, otra por saltar, otra por agredir..., pero vienen a recordarte que estás
vivo, y activa zonas de ti, que no tienen que ver ni con el cuerpo, ni con la
mente ni con la emoción, es mucho más que eso.
Normalmente cuando escribes una canción ocurre algo… si estás
totalmente inmerso en la composición tal vez hayan pasado horas y no te has
dado cuenta. Has entrado en ese estado que llaman “flow” creativo. Créeme que
si eso ocurre… la sensación es de haber hecho el amor, has creado algo, no es
algo mecánico, has entrado en un universo matemático, en el que ha habido
sincronía con el instrumento, tu emoción, el universo y todo se ha plasmado en
esa idea y secuencia de notas. No es algo sencillo. Supongo que a esto lo
llaman las musas, el caso es que cuando estas cosas ocurren… el cerebro debe
generar bastante adrenalina y serotonina pues la sensación de felicidad es
grandísima. Es una conexión muy difícil de explicar.
¿No te ha ocurrido alguna vez que en medio de una fiesta,
bailando y bailando pierdes la noción del tiempo y es como si hubieras
viajado?. Ese es el sentido espiritual de la música.
La música normalmente se puede escuchar de diferentes modos y
con diferentes objetivos. Créeme que cuando repetimos una y otra vez una
canción, es porque ha estimulado una parte del Alma que en ese momento
necesitaba ser tocada.
Tras escribir estas líneas quise buscar qué se ha escrito sobre
el tema.. y he encontrado cosas muy en la línea pero de una profundidad enorme:
Investiga este enlace, es maravilloso.
Música,
sociedad y prejucios.
Entendiendo esto, voy a repetir algo que dije hace muchos años
en una entrevista para el periódico “Pepe Benavente es Dios”. ¿Te irrita esta
afirmación?
Una vez acudí a un baile de una residencia de ancianos, todo iba
normal, ancianitos mirándose hablando sentados, música sonando, música de su
tiempo, etc… Empezaron a sonar canciones más “modernas” de verbena, y pronto
apareció su canción estándar “El Oolvorete”, que también podría ser “Gangnam Style" en otro tipo de fiesta, da lo mismo. Y a partir de aquí surgió la magia,
resulta que Pepe Benavente ha logrado estar en sincronía con las diferentes
necesidades de gran parte de la población dentro de una cultura.
Hablando de esto… no es necesario que el artista sea espiritual
ni tenga inquietudes en este sentido… estamos en un error cuando consideramos
que esa obra es nuestra, simplemente nosotros somos el vehículo, un canal…
aquellos que consideren que su obra es de su propiedad, el día que falten las
musas entrará en grave crisis personal, pues no ha entendido su papel en todo
esto.
Bien. Surge el efecto que quienes adoran una música, más si
tiene un carácter de cultura urbana, suelen detestar el resto. Ese es un
fenómeno normal pues muchas veces nos vinculamos a la música que nos va a
reforzar nuestra identidad, por lo tanto rechazamos aquella en la que nuestra
identidad se vea en peligro. Al fin y al cabo, es una limitación, al igual que
podemos disfrutar de las diferentes comidas del mundo, ¿Por qué no disfrutar de
la amplitud del abanico musical sin prejuicios? Si te irrita,
pues también está tocando algo de tu alma que aún no vive en libertad plena.
Músicas extremas, oscuras y espiritualidad.
Muchas veces se asocia el vínculo música-espirituralidad, a un
tipo de música tipo “New Age” “Godspell” etc. Cierto es que pueden tener unos
códigos más armónicos que ayuden al oyente a entrar en terrenos luminosos y
esperanzadores de su alma, pero… no necesariamente tiene que ser así.
Mucha gente que detesta o no soporta este tipo de códigos
“newage” puede también sentir esta conexión espiritual. El caso es tocar el
alma. Algunas músicas “extremas” van focalizadas a un alma en desarrollo un
alma cargada y ávida de nuevas experiencias, muy profundas, dolientes etc…
Dime algo.. ¿crees que hay espiritualidad en esta canción... ?
Créeme que este tema está cargado de espiritualidad. Tanto o más que algunos de estilo más new age. Los códigos de este tema tal vez no los entiendas, pero tiene tantos elementos neo-clásicos que si quitaramos distorsiones, velocidad, baterías y dejáramos solo piano, cambiáramos guitarras por violines etc... te conmovería sin duda!
Hace poco un paciente me dijo.. a mí me gustaba “The Cure”. Vi
en él un contenedor inmenso de desarrollo espiritual. Pues es la sensibilidad
de estas personas las que hacen que su alma “llore” ese es otro modo de vivir
la magnitud de la espiritualidad. Hay algunas músicas que son profundamente
dolorosas, como el “Doom Metal”. Es curioso como esta música en muchos casos
utiliza componentes religiosos.
Uno de los más claros ejemplos de que había una espiritualidad latente dentro de sus composiciones caóticas son el grupo Inglés Anathema. A lo largo de sus 25 años de carrera, han pasado de canciones que hablan de caos y desilusión a una música luminosa y grande.
Uno de los más claros ejemplos de que había una espiritualidad latente dentro de sus composiciones caóticas son el grupo Inglés Anathema. A lo largo de sus 25 años de carrera, han pasado de canciones que hablan de caos y desilusión a una música luminosa y grande.
Me ha gustado este artículo al respecto.
Actualmente sus mejores veladas suceden dentro de Catedrales
Inglesas.
Música, emociones y beneficios.
Quisiera terminar esta reflexión con una muestra de los beneficios de abrirnos a la música en nuestra vida. A más mejor.
Sin duda podría seguir escribiendo durante horas sobre el asunto, tal vez me anime en otra ocasión a hacer una segunda parte. Sí que me encantaría conocer tu punto de vista y conocimiento sobre ello, y por eso te animo a que comentes este artículo! Ha sido un placer escribirlo!
Me despido con mi banda favorita, los únicos QUEEN y un tema muy emotivo y "espiritual". ¿Quién quiere vivir para siempre?
El sonido favorito de Dios es el sonido de Su Música interna. Esta Música interna es la música de la transformación de la Tierra y de la perfección de la vida de la humanidad.
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